En estos breves Sostiene… busco que el lector eche el resto. Cuando hace poco dije que “en todas partes cuecen habas” entendía que los estereotipos sobre los hombres y los pueblos desmerecen de la realidad personal. En su libro Emociones corrosivas (Ariel), el profesor Ignacio Morgado se cuestiona cuál es el mejor modo de combatirlas, y señala que a largo plazo lo es “la educación y la cultura”. Hay sugerencias para mantener a raya las emociones corrosivas, como humanizar al adversario: “el mejor modo de aliviar nuestros males sentimentales”.
Ignacio Morgado, quien postula que leer permite vivir mundos ajenos y mejorar la comprensión de los demás, sostiene que “hay personas que lo pasan mal cuando se sienten odiadas por otras”. Es con los acosados con quienes debemos estar. El odio impide pensar en las razones del odiado, nos hace peores y quiebra el estado de ánimo sano.
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