La localidad barcelonesa de Collsupina cuenta con un consistorio que ha decidido incumplir la normativa vigente por partida triple: no está la bandera de España en el mástil principal junto a las otras banderas, en su lugar luce la «estelada» y cuenta con una pancarta partidista con el mensaje «libertad presos políticos» acompañado de un lazo amarillo.
El alcalde es Oriol Batlló i Farriol, de Ara Collsupina, una formación aliada con Esquerra Republicana, y ha decidido que el ayuntamiento es solo de los separatistas y que puede convertir el edificio consistorial en un escaparate de propaganda partidista.
Rogamos a los lectores nos remita imágenes de edificios públicos con propaganda secesionista a edicioneshildy@gmail.com, para poner en evidencia como el independentismo ha decidido despreciar a los que no piensan como ellos usando las instituciones que controlan de forma partidista.
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