El independentismo considera el idioma catalán como su religión, algo que tratan de imponer sí o sí, en cualquier esfera de la sociedad y en cualquier circunstancia. Y con ello tratan de arrinconar el castellano, obviamente sin ningún tipo de éxito.
El último ejemplo lo tenemos con el Papa Francisco y una la audiencia a los participantes en el peregrinaje hasta el Vaticano de la cofradía de la Mare de Déu de Montserrat, con motivo de los 800 años de su fundación, en el cual también tomaron parte una sesentena de gerundenses, miembros de la cofradía de l’Hospitalitat de Lourdes.
El Papa Francisco preguntó al cardenal Juan José Omella por la lengua en qué estaba escrito un texto que tenía que leer el pasado 7 de octubre durante la audiencia. El documento estaba en castellano, y Omella dio su ‘ok’ al santo padre. Lo que ha hecho montar en cólera al secesionismo. A partir de aquí se ha desatado una campaña en contra del arzobispo de Barcelona.
Hasta el punto que Omella se vio obligado a intervenir en RAC1 para desmentir cualquier tipo de animadversión hacía el idioma regional. «No tengo nada en contra de la lengua, que para mí es la materna”, afirmó el arzobispo de la capital catalana. Ahora, un colaborador de TV3 lo ha acusado, a través de un tuit, de «menospreciar» y «autoodiar» el catalán.
«Omella dice en RAC1 que, aunque el catalán es su lengua materna, no lo habla bien porque es de la Franja (?). Lo habla perfectamente. Dice que habla ‘chapurriau’. Decir ‘Xapurriau’ es una manera consciente o inconsciente de menospreciar/estigmatizar una lengua y de mostrar autoodio«, asegura Òscar Andreu en su cuenta de X.
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