El separatismo colecciona un nuevo varapalo judicial, en esta ocasión por su obsesión de imponer el catalán y por consiguiente por tratar de arrinconar al castellano.
Asamblea por una Escuela Bilingüe ha vuelto a vencer en un contencioso contra la Generalitat. Esta asociación había impugnado el funcionamiento de las Pruebas de Acceso a la Universidad del curso 2021 porque la Generalitat no repartía los exámenes en las dos lenguas oficiales de Cataluña.
El TSJC ha declarado nulo el párrafo tercero del apartado 1.2.2. de las instrucciones que obligaba a los miembros de los tribunales de las PAU a repartir primero los enunciados del examen en catalán, y sólo hacerlo en la versión castellana si alguno de los alumnos lo reclamaba expresamente.
La sentencia dictaminada por la justicia declara que los derechos de los alumnos son siempre superiores a los intereses organizativos de la Administración educativa y expone que los alumnos no tienen por qué expresar en público su opción lingüística en las pruebas de acceso de la universidad.
Este es un nuevo varapalo para los independentistas, obsesionados con la imposición del catalán y que tanto daño esta haciendo a este idioma.
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