Inés Arrimadas ha participado en un acto de campaña celebrado en l’Hospitalet de Llobregat y ha advertido que los votos al PSC pueden derivar en un gobierno tripartito con ERC y Podemos, “por lo que pido a los hospitalenses que acuden en masa a las urnas para garantizar el cambio que tanto necesita esta ciudad y que solo Cs puede conseguir.”
Un cambio que Arrimadas ha considerado necesario para que el Ayuntamiento no se convierta en altavoz del separatismo, “como seguirá evitando Cs en el Parlament de Catalunya que ahora queda en buenas manos con Carlos Carrizosa y Lorena Roldán al frente.”
El acto ha servido a modo de presentación del equipo de Cs l’Hospitalet que lidera Miguel García en la carrera por la alcaldía de la ciudad. García ha agradecido a Arrimadas su labor desde Catalunya por defender sin complejos el constitucionalismo frente al separatismo radical, “algo que seguro seguirá haciendo desde el Congreso”.
El portavoz naranja ha hecho hincapié en las políticas sociales que Cs se compromete a acometer como construir residencias para las persones mayores y guarderías públicas de 0 a 3 años, trabajar por la accesibilidad universal en la ciudad y por el deporte inclusivo y de base social, invertir en los barrios del norte para acabar con la ciudad de dos velocidades o crear un banco de libros de texto gratuito. “Políticas sociales que el gobierno del PSC de Núria Marín ha abandonado porque su único interés es perpetrar el cargo”, ha concluido García.
El exalcalde de l’Hospitalet y candidato número tres de la lista de Manuel Valls por Barcelona, Celestino Corbacho, ha estado también presente para mostrar su apoyo a la candidatura de García, “un amigo que aprecio y conozco bien, que sé que tiene una conciencia social real y que centra su proyecto en el bienestar de los vecinos y vecinas”.
Corbacho ha agradecido a Inés Arrimadas y al partido de Cs la generosidad por no presentar un candidato propio en Barcelona y apoyar la lista de Manuel Valls, “una lista transversal formada por persones que no pertenecen a ningún partido y que trabajará para que Barcelona no sea solo de color amarillo, sino para que todos, independientemente de su ideología o pensamiento, se sientan identificados y atendidos por el proyecto de su ciudad”.
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