La Guardia Civil y la Policía Nacional han llevado a cabo conjuntamente la operación Ferramenta-Patinet que ha permitido desarticular en Barcelona una organización criminal dedicada a la comisión de estafas mediante la inserción de anuncios en páginas web de
internet, donde ofertaban diversos bienes de consumo, tales como patinetes eléctricos, generadores, así como mascarillas sanitarias y test Covid-19 y han sido detenidas ocho personas por la supuesta comisión de los delitos de pertenencia a organización criminal y estafa.
La investigación se inició al detectar numerosas denuncias por todo el territorio nacional de estafas en la venta de diversos productos en conocidos portales de internet y se creó un Equipo Conjunto de Investigación entre agentes del grupo de delincuencia patrimonio económica de la Unidad Orgánica de la Guardia Civil de Barcelona y del grupo II de delitos tecnológicos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Policía Nacional de Barcelona competentes en investigación tecnológica con el fin de aunar esfuerzos.
Para llevar a cabo las estafas utilizaban una potente infraestructura y se valían de los amplios conocimientos informáticos que tenían los integrantes de la trama, en la creación de páginas Web. Gracias a este extremo lograban un diseño de gran calidad y posicionamiento preferente en los principales buscadores de Internet, lo que permitía captar a muchas más víctimas potenciales, interesadas en este tipo de productos.
Desde las páginas web utilizadas por la organización, se facilitaba el pago de los productos ofertados, bien a través de tarjetas bancarias o bien mediante transferencias a cuentas facilitadas por personal que interactúa desde el supuesto departamento comercial de la empresa fraudulenta.
Una vez realizado el ingreso por las víctimas, el envío del producto en un alto porcentaje de casos nunca llegaba a producirse, aprovechándose de los períodos de envío y de su propaganda de compra con reserva, que podía suponer a los clientes, supuestamente, un ahorro del 60% del valor del producto.
Cuando los compradores reclamaban su producto, alegaban problemas de stockage, logística, o de incumplimiento de plazos por parte de proveedores, administrativos, etc. y así prolongar en el tiempo su reclamación. Solamente cuando tenían conocimiento de que se había presentado algún tipo de denuncia ante la Policía, era cuando contactaban con las víctimas para devolverles el dinero abonado.
De esta manera evitaban la actuación de la justicia presentando los justificantes de la devolución del dinero al comprador, provocando de esta manera el sobreseimiento de las actuaciones.
Esta organización criminal adaptó el tipo de producto que ofertaba a la actual circunstancia de alerta sanitaria que vivimos. Entre los productos ofertados se encontraba todo tipo de material sanitario, en especial mascarillas, EPIS y test de detección COVID-19, con gran demanda en la actualidad y que les permitía captar a un gran número de víctimas.
El desarrollo de la investigación fue obstaculizado por la utilización de intermediarios a modo de testaferros en su entramado mercantil y de diseño de páginas webs.
A lo largo de la investigación se ha podido identificar a un total de 84 víctimas, ascendiendo el valor total del dinero defraudado a unos 175.000 euros.
Como consecuencia de lo ocurrido se ha desarticulado la organización criminal y se ha detenido a ocho personas de nacionalidad española, vecinos de Barcelona, por la presunta comisión de los delitos de pertenencia a organización criminal y estafa.
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