A principios de año, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, declaró en la cadena de televisión La Sexta que las delegaciones de la Generalitat de Cataluña se dedican sólo a obtener representaciones comerciales.
¡Nada más lejos de la realidad! Las delegaciones de la Generalitat ,dirigidas por el aparato de propaganda Diplocat tienen dos misiones fundamentales: 1) Manchar continuamente la imagen de España en el extranjero. 2) Hacer creer que todos los catalanes son separatistas, cuando no lo son, ya que en realidad no son ni la mitad.
Las actividades desestabilizadoras de Diplocat en contra de la democracia española no han cesado. A principios de este año han continuado con su línea habitual de mentiras y manipulaciones.
El 21 de Enero, Elena Jiménez, miembro de la propagandista Omnium Cultural, se reunió con la fugitiva Marta Rovira en la sede de la ONU, en Ginebra, para denigrar, una vez más, la imagen de España, en una conferencia sobre derechos humanos.
La semana pasada, fue el lobista suizo Mathieu Crettenard, rector adjunto de la Universidad de Ginebra, quien se unió en Dinamarca a Jean Bardolet, de la Asamblea Nacional de Cataluña (ANC: órgano de propaganda totalitaria con el objetivo de poner en duda la moralidad de España), en una conferencia organizada por el más importante sindicato danés de abogados y economistas:Djøf, que cuenta con 80.000 miembros.
Crettenand aprovechó la oportunidad para cuestionar la moralidad española y afirmar que el pueblo catalán estaba unido ante la sedición. Nos preguntamos qué interés le mueve. El jueves 23 de enero varios cargos electos del Jura recibían a Manuel Manonelles (responsable de la “delegación” de Cataluña en Ginebra), en la ciudad de Delémont con el mismo objetivo difamatorio.
El único punto positivo es que el ejecutivo del cantón de Jura rechazó las solicitudes del inquilino de la delegación de la Generalitat, ubicada en la rue Rousseau 38, en Ginebra. La asociación suiza y apolítica «Catalunya Peuple d’Espagne” ya había intervenido en relación a este lance en agosto pasado ante el gobierno de Jura. Nuestro trabajo ha valido la pena. Más que nunca, parece que nadie vendrá a salvar a la mayoría social catalana del siniestro proyecto separatista, supremacista y totalitario. Es hora de los constitucionalistas se movilicen masivamente, con lucidez y convicción.
François Meylan
no recibe subvenciones de la Generalitat de Catalunya.
Si quieres leer nuestras noticias necesitamos tu apoyo.