Este próximo fin de semana se celebra en Madrid el congreso extraordinario de Cs con el que se culminará el proceso de refundación del partido naranja, y lo hace con una tremenda división en el seno de la formación liberal. Este pasado lunes se celebró el último debate de la campaña, y uno de los candidatos a la portavocía, Marcos Morales, pidió disculpas por “la imagen y el espectáculo” de los últimos días.
Morales lidera la candidatura de ‘La Base del Cambio’, la cual en teoría tiene pocas opciones de hacerse con el control del partido. En este sentido la lista de Adrián Vázquez y Patricia Guasp, parte como favorita, por delante de la de Edmundo Bal y Santiago Saura. En las últimas horas, el cruce de acusaciones de estas dos últimas alternativas a hacerse con el poder del partido han dañado la ya maltrecha imagen de Cs, y es por ello que muchos afiliados han mostrado su bochorno.
Morales fue contundente en el último debate y por ello comenzó su intervención disculpándose “por la imagen y el espectáculo” de estos últimos días. Además, se mostró crítico con el proceso de refundación, que ha tildado de “opaca” y de “pasteleo”, ha criticado las decisiones de la actual dirección, “que ha caído en el ‘establishment‘” y “vendido sus valores”.
También ha arremetido contra el modelo de dirección bicéfala propuesto, los “valores” de los actuales dirigentes ‘naranjas’ y lo que ha llamado el “plan de Arrimadas”: “mantenerse en el poder y seguir gobernando ella detrás”. También ha habido para Edmundo Bal, a quien ha reprochado “no haber alzado la voz antes” y haber perdido la “credibilidad” en consecuencia.
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