Un sondeo interno realizado por la Associació Catalana de Recursos Assistencials (ACRA) asegura que un 96% de los ancianos de las residencias y centros de personas mayores de Cataluña y un 80% de los trabajadores de los mismos quieren recibir la vacuna del COVID-19, que ha empezado a inyectarse este pasado domingo.
La ACRA es una organización empresarial que agrupa al 70% de las residencias, centros de día, servicio de ayuda a domicilio, centros sociosanitarios, entidades tuteladas y teleasistencia a mayores de Cataluña, con 439 entidades asociadas, 44.228 plazas y que cuenta con 37.269 trabajadores directos y más de 10.000 indirectos.
En un comunicado la presidenta de la ACRA, Cinta Pascual, afirma que “vacunarse es un acto de responsabilidad y por ello hacemos una llamada a todo el mundo para que se ponga la vacuna” y pide a la Generalitat que aumente la intensidad de su campaña de información para disipar “las dudas”.
Esta entidad asegura que el 90% de los ancianos que viven en residencias padecen diversas patologías, por eso defiende la importancia de la vacunación “en un entorno extremadamente frágil”. Y ruega que este sector “no baje la guardia” ya que “aún falta tiempo para poder recuperar la normalidad”.
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