El alcalde de la localidad barcelonesa de Santpedor, Xavier Codina (ERC), debe estar encantado con que su ciudad esté llena de lazos amarillos en las farolas. Esta población es la cuna del popular entrenador de fútbol Pep Guardiola, uno de los iconos del separatismo catalán.
Debido a la altura a la que se han colocado los lazos seguro que han sido instalados con una grúa, aspecto que debería ser de conocimiento municipal. Aunque seguro que cuenta con el aplauso del equipo de gobierno de la ciudad, dada la abundancia de este tipo de símbolos en la vía pública.
El lazo amarillo es un símbolo excluyente, y es omnipresente en la vía pública en las calles de muchos pueblos catalanes para mostrar el desprecio que los separatistas sienten hacia los que no piensan como ellos. Les da igual que sean sus amigos, padres, hermanos o parejas. Ellos ocupan el espacio común con sus símbolos para demostrar que «las calles serán siempre suyas».
Santpedor es un ejemplo más de lo que sería una República catalana en manos de los separatistas: un régimen político totalitario en el que solo cabe la adhesión inquebrantable a los símbolos separatistas sí o sí. Si no quieres lazos, amarillos toma dos tazas y bebételas sin rechistar, ese es lema de la Cataluña secesionista.
NOTA: En estos momentos de crisis y de hundimiento de publicidad, elCatalán.es necesita ayuda para poder seguir con nuestra labor de apoyo al constitucionalismo y de denuncia de los abusos secesionistas. Si pueden, sea 2, 5, 10, 20 euros o lo que deseen hagan un donativo aquí).
no recibe subvenciones de la Generalitat de Catalunya.
Si quieres leer nuestras noticias necesitamos tu apoyo.