Los pericos hemos cometido muchos errores y hemos desaprovechado muchas ocasiones a lo largo de nuestra historia. Pero no tenemos que caer en el desánimo. es más que posible que las próximas generaciones espanyolistas, tengan un RCDE fuerte, que juegue en Europa cada pocos años y que consiga disputar un par de finales por década.
El sentimiento blanquiazul sigue siendo fuerte y poderoso, y está más vivo que nunca. Hemos de aprovechar todas las características positivas de nuestra afición para soñar con un club mejor. La grada perica bulle esta temporada, hay mucha ilusión, muchas ganas, mucha energía positiva que hemos de aprovechar.
Sesenta años pueden parecer muchos, pero fueron los que pasaron desde que conseguimos nuestra segunda Copa (1940) hasta la tercera (2000). En la vida de un club tan arraigado en su gente como el Espanyol, seis décadas no es nada. Si vamos avanzando, si vamos mejorando, si nuestra gente va comprobando como poco a poco vamos a más, el camino se nos hará llevadero y al final conseguiremos nuestro objetivo.
Muchos estaremos en la lucha. Y ojalá cada día seamos más. De ti depende. De todos nosotros depende. Pero recordad que el error no está solo fuera de nuestras murallas, también tenemos defectos, y tenemos que corregirlos. Solo así podremos cumplir nuestros sueños.
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