Este jueves se está celebrando en Barcelona una cumbre hispanofrancesa con la presencia de Pedro Sánchez y Emmanuel Macron, una cita importante para los dos países y ante la cual el separatismo no va a perder la oportunidad de montar una nueva performance.
De hecho, ha quedado patente de forma muy clara la ‘esquizofrenia’ en la que vive instalado el separatismo, y es que mientras que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, se pasó por la cumbre para única y exclusivamente saludar a los participantes, su partido se manifestó en las calles de Barcelona contra la cumbre.
Las juventudes de Esquerra ya comenzaron la ‘fiesta’ esta pasada noche, donde se han dedicado a ensuciar Barcelona con pintadas en el mobiliario urbano y con enganchada de carteles también en zonas públicas de la capital catalana. Entre los mantras que han utilizado se pueden leer “Ni España. Ni Francia. Países Catalanes” o “Sánchez y Macron fuera de los Países Catalanes“.
Los cachorros independentistas vuelven a demostrar una vez más su absoluto desprecio por los espacios que pertenecen al conjunto de los ciudadanos y campan a sus anchas con el visto bueno de un ejecutivo catalán que este jueves participará en el aquelarre secesionista para tratar de ‘reventar’ la cumbre hispanofrancesa.
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