
Los líderes separatistas siempre habían hecho creer a sus fieles que Europa les abriría los brazos de par en par para defender sus postulados, pero se están encontrando con una cruda y dura realidad, y este viernes han sufrido un nuevo varapalo.
La Comisión Europea y el Parlamento Europeo han plantado este viernes la entrega del Premio Ernest Udina a la Trayectoria Europeísta que otorga cada año la Asociación de Periodistas Europeos de Cataluña porque el galardón incluye un lazo amarillo.
Dicho premio este año se había otorgado al corresponsal de Libération en Bruselas, Jean Quatremer, y si no tenían bastante con incrustarle un lazo amarillo al galardón, además también le han introducido la frase «Votar no es un crimen«.
Una portavoz de la Comisión Europea ha afirmado a la Agencia Catalana de Noticias que la escultura representa «un mensaje político que va más allá del marco institucional» y que no se corresponde «a los criterios de neutralidad» de la institución.
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