El secesionismo más radical, el de la ANC, los CDR, Òmnium Cultural y el resto de entidades que llevan años destrozando la buena convivencia en Cataluña ya están planificando su tradicional ‘kermesse’ anual del 11 de septiembre.
Y como buena partida carlista, gustan de visitar la ilustrada barcelona para llenar con sus boinas mentales las calles de la ciudad, y crearse la ilusión que la metrópolis es suya, cuando año tras año esta les repele y por eso se ven obligados a organizar autocares (pagados por todos) para ‘vender’ con su propaganda que la dominan.
Si son felices creyéndose sus mentiras, allá ellos. Este año han escogido como epicentro de su fiestecita anual la plaza España. Esperemos que muchos de ellos no lleven ajos o cruces con estacas, porque es decir “España” y a más de uno le salen granos.
Aunque la auténtica esperanza es que a esta banda de “paseadores de antorchas” y “pintadores de lazos amarillos” se le pegue algo bueno por estar en la “plaza de España”. Porque frente a la República totalitaria a la que ellos aspiran, en la que excluirían a los millones de catalanes que no piensna como ellos, se alza la España democrática que es respetada en la Unión Europea.
Ojalá se les pegue algo bueno. Aunque nos tememos que sus mantos amarillos repeleran cualquier brizna de democracia que intente impregnarles.
Comentario editorial de elCatalán.es
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