Algo pasa en Societat Civil Catalana (SCC) para que continuamente se empeñen en desgastar su marca con acciones que no hay quién las entienda. La última ‘sorpresa’ de su actual presidente, Fernando Sánchez Costa, ha consistido en reivindicar a Francesc Macià como un ejemplo de “pactismo” frente a los actuales dirigentes de los partidos secesionistas.
Exacto. Societat Civil Catalana hablando de Francesc Macià como un ejemplo a tener en cuenta, justo lo que el constitucionalismo catalán necesita en plena etapa de “lo volveremos a hacer” del separatismo que gobierna Cataluña. Macià, el referente de Esquerra Republicana. Macià, el fundador del violento y supremacista partido ‘Estat català’. Macià, el que organizó el intento de invasión de Cataluña mediante el complot de Prats de Molló, una de las charlotadas más patéticas, pero al mismo tiempo violentas, planeadas por el secesionismo a lo largo de su historia.
No es un malentendido. No es una entrevista en la que el periodista haya escogido mal el titular, o haya transcrito una conversación con Sánchez Costa de manera incorrecta. Es el presidente de Societat Civil Catalana el que, suponemos que como opinión personal, ha reivindicado de primera mano a Macià. Lean el tuit que acompaña a esta noticia. Sánchez Costa tiene todo el derecho del mundo a expresar lo que desee, pero Macià fue el que fue, y por eso el separatismo más radical lo tiene en sus altares.
Insistimos, Sánchez Costa tiene derecho a expresar sus opiniones y puede pensar lo que crea oportuno, y es libre para intentar desacralizar al Macià separatista que motiva que cada 25 de diciembre, día de su fallecimiento, los principales líderes secesionistas vayan a su tumba a rendirle homenaje. Pero, y es solo un consejo, solo debería recurrir a Macià para condenar la ideología supremacista que encarnó durante buena parte de su vida política.
Todo lo demás es querer jugar a una equidistancia vergonzosa que solo sirve para que Societat Civil Catalana, entidad que tan buenos servicios dio al constitucionalismo, se desgaste. En los dos últimos años los errores de los dirigentes de esta asociación han sido tan abultados que han servido para que ya no sea el gran referente del constitucionalismo catalán, papel que ha sido asumido por entidades como ‘S’ha Acabat!’ o la Asamblea por una Escuela Bilingüe. Los dirigentes de estas dos asociaciones ni citan ni reivindican a Macià, ni como opinión personal ni como postura de sus colectivos, y tal vez por eso tienen cada día más credibilidad. SCC llevaba unas semanas con varios aciertos, como la reciente encuesta que encargó en la que se demuestra que los catalanes no apoyan la inmersión lingüística, y este patinazo de Sánchez Costa desluce este buen trabajo.
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