El independentismo más radical vive absolutamente obsesionado con imponer el catalán en todas las esferas de la sociedad, dándole igual la libertad que deben tener las personas y las empresas para utilizar el idioma que más les convenga.
Afortunadamente sus imposiciones no hacen más que obtener fracasos, de hecho el castellano es el idioma más utilizado por la ciudadanía catalana, así lo demuestran todas las encuestas publicadas hasta la fecha, y es un hecho que ha ido a más, sobre todo entre los más jóvenes, que huyen de cualquier tipo de imposición.
El último ridículo ha llegado del dramaturgo del régimen separatista, Joan Lluís Bozzo, quien ha señalado públicamente a un restaurante de Barcelona por el simple hecho de no utilizar el catalán. Por supuesto, su mensaje ha corrido como la pólvora entre los más fanáticos que han hecho un llamamiento para boicotear al restaurante en cuestión. No es la primera vez que Bozzo se dedica a hacer este tipo de señalamientos por temas lingüísticos. Algunos viven obsesionados con la imposición del catalán, y le están haciendo a esta bella lengua un daño irreparable.
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