El portal Dolça Catalunya ha difundido un reportaje del canal alemán DW en el que se escucha a una enfermera, Nerea García, que trabaja en un hospital de Barcelona dando testimonio de un hecho escalofriante.
Esta trabajadora sanitaria narra en primera persona (se puede ver en el vídeo adjunto (a partir del minuto 9′ 22») la guardia que vivió el 5 de abril. Por las imágenes del hospital parece el de Bellvitge, en la localidad de L’Hospitalet, que depende de la consejería de Salud de la Generalitat.
Narra como «se nos ha parado un señor, ha entrado en parada cardiorespiratoria aunque tenía los dispositivos puestos y demás, hemos iniciado maniobras de RCP, pero no hemos conseguido reanimarlo»
«Cuando han llegado los médicos para valorarlo, era mayor de 70 años. Tenía 77 años y requería un tubo. Un tubo significa que requería ingreso en la UCI. Al ser mayor de 70 años ya no entraba dentro de los criterios de inclusión. Con lo cual hemos parado de hacerle RCP y simplemente hemos dejado que se fuera».
Añade, con emoción y dolor en la mirada, que «es una sensación recurrente de que a pesar de que lo hacemos todo, nos dejamos la piel, nos dejamos los cuernos, nos dejamos el alma, no salen las cosas. No funciona. Un paciente que en situación normal habríamos recuperado perfectamente, habría bajado a la UCI y habría vivido 10 años más, no hemos podido salvarlo esta noche”.
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