Pedro Sánchez y Salvador Illa repitieron hasta la saciedad que los indultos y posteriormente la amnistía traerían a Cataluña la “normalización” y sobre todo la “pacificación” de la comunidad autónoma catalana.
Era una mentira más del socialismo para perpetuarse en el poder con el apoyo de los independentistas. El único interés que tiene Pedro Sánchez es el de seguir ocupando La Moncloa el mayor tiempo posible, y si para ello ha de vender a los catalanes, lo hace sin ningún tipo de problema. La realidad es que los secesionistas siguen campando a sus anchas, y son capaces de copar los pregones de las fiestas mayores para soltar un “Puta España” o colocar símbolos independentistas, tal y como ocurrió en Vilafranca del Penedés, donde gobierna el PSC.
A raíz de lo sucedido en esta localidad barcelonesa, se ha hecho viral en redes sociales una propuesta para los distintos pregones de las fiestas que se celebran en estas fechas en Cataluña. “Todos los pregones deberían acabar con un Puta España y una posterior quema de rojigualdas”. La “normalización” y “pacificación” de la comunidad autónoma catalana marcha sobre ruedas…
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