La compra de la red social Twitter por Elon Musk ha generado muchas expectativas, y alguna que otra polémica. De hecho, se han anunciado despidos masivos de los ‘controladores’ que habían convertido esta red social en nuestro país en un paraíso para los separatistas y aliados en contra de la unidad del país, y en un infierno para los que defienden la Constitución y el Estado de Derecho.
Aunque se tiene que dar tiempo a Elon Musk para que introduzca los cambios que tiene en mente para evitar el sectarismo en esta red social, hay temas simbólicos muy sencillos de hacer y que la nueva propiedad de Twitter sigue sin afrontar. Por ejemplo, si uno va al perfil oficial de Twitter Francia, está engalanado con los colores de la bandera de este país, como es lógico.
Si se va al perfil oficial de Twitter Reino Unido, o al de Twitter Brasil, también aparecen los colores de sus respectivas banderas nacionales. Pero quién visite el perfil oficial de Twitter España no verá los colores rojigualdos por ningún lado, dado que solo está el azul corporativo de esta compañía.
Para esta empresa se ve que España es una nación de segunda que no merece ni el respeto de mostrar sus colores nacionales en el perfil oficial de su delegación en el país. Mucho trabajo tiene por delante Musk para recuperar la credibilidad de esta red social.
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