Las universidades catalanas van camino de ser centros totalitarios en los que el debate está excluido y que solo sirven como correa de transmisión de la propaganda independentista. La Universidad de Barcelona, regida por un rector que depende de la ANC, Joan Guàrdia, es el máximo exponente de este sectarismo que acecha a estos centros educativos.
Estas instituciones tendrán como misión no producir conocimiento, sino legitimar de todas las barbaridades separatistas. No solo se dirá que los profesores discrepantes son “fascistas” y “colonos”, como pasó en la Universidad de Barcelona en su claustro ante la complicidad de Joan Guàrdia.
A los discrepantes se les hará la vida imposible hasta que abandonen sus cátedras para poner en su lugar a un fanático secesionista que defienda que España es una dictadura y que la Cataluña independentista es el pueblo escogido. Este es el futuro que le espera a las universidades catalanas.
Los jóvenes constitucionalistas de S’ha Acabat! han sufrido las peores prácticas de los rectores y de las bandas de la porra integradas por violentos separatistas que campan a sus anchas, impunemente, por las facultades catalanas.
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