A priori se debe de suponer que las ideologías políticas deben de regirse por valores y principios fundamentales, que no se contradigan entre ellos para evitar que la utopía se convierta en distopía. Por extensión las personas que profesan esas ideologías, y aquellos que tienen la prerrogativa de ejercer labores de gobierno nacional, autonómico o municipal, deben o deberían por lo menos y en la medida de lo posible, ser consecuentes con su propia ideología y la de su partido, intentando en todo momento evitar incurrir en la contradicción.
Se ha de reconocer que los que profesan ideologías, muy diferentes todas ellas, que podríamos enmarcar en el ámbito terminológico de las derechas, como son el liberalismo, el conservadurismo o el humanismo cristiano, son consecuentes con lo que imponen sus propias ideologías. Sin embargo el problema ha sobrevenido cuando partidos políticos como el PP y Ciudadanos, han acogido en su seno aspectos ideológicos que tradicionalmente han pertenecido a la izquierda, como la desestructuración de la familia tradicional, la ideología de género, las políticas migratorias, las de discriminación positiva, o las políticas de desaprecio hacia la vida humana, entre otras.
En el otro ámbito de la izquierda, a lo largo de toda su historia, desde las tesis de Carlos Marx y Frederich Engels hasta la actualidad, las flagrantes contradicciones en las que ha incurrido la izquierda han sido continuas. La materia es tan amplia que daría de sí perfectamente para un voluminoso libro, y por ello me voy a limitar a establecer una relación numérica y esquemática de las treinta contradicciones de la izquierda.
1º.- Pese a su origen netamente totalitario, la izquierda moderna hace gala de su defensa del sistema democrático parlamentario. Sin embargo esta postulación no les ha evitado defender los regímenes dictatoriales, en los que se vulneran sistemáticamente los derechos fundamentales y las libertades democráticas.
2º-. La izquierda siempre se ha decantado a favor del sistema de gobierno republicano, cuando curiosamente muchos países con regímenes izquierdistas como Cuba, Nicaragua, Argentina o Corea del Norte, tienen o han tenido presidentes de la república, que son hijos o cónyuges del presidente anterior, convirtiéndose en una especie de repúblicas hereditarias, parecidas a las monarquías.
3º.- Se establece como modelo la Segunda República española, que era una república nacional y unitaria, cuando simultáneamente se aboga por la independencia de territorios como Cataluña o el País Vasco.
4º.- Desde sus inicios la ideología de izquierdas se ha definido así misma Internacionalista, y no ha tenido reparo por ello en apoyar nacionalismos locales potenciando el separatismo.
5º.- En la misma línea de lo anterior, la solidaridad entre pueblos, que es uno de los valores estrella de la izquierda, no ha evitado que muchos partidos políticos de izquierda y de extrema izquierda, desde el PSUC de 1936 hasta la CUP, sean nacionalistas.
6º.- Defienden la libertad de pensamiento y al final imponen el pensamiento único, como ha ocurrido siempre desde los inicios del Partido Comunista de la Unión Soviética, de Lenin, hasta el moderno Unidas Podemos del Sr. Iglesias, pasando por el resto de partidos socialistas y comunistas a lo largo de su dilatada historia, en los que se han producido sucesivas purgas internas.
7º.- Abogan por los más desfavorecidos de la sociedad, lo que en terminología marxista se denomina “parias”, y en cuanto tienen ocasión, por los dividendos que les procura su actividad profesional pública derivada de la política, se rodean de lujos y de riquezas. Bajo esta premisa se podría decir en términos generales, con honrosas excepciones, que las personas de izquierdas odian a los ricos pero adoran la riqueza.
8º.- La izquierda siempre ha abominado del capitalismo financiero, que se basa en la obtención desmesurada de capital obtenido por medio maniobras financieras especulativas, y fueron precisamente los sucesivos Gobiernos de Felipe González los que instauraron en España la cultura del pelotazo.
9º.- Hacen gala constante de la transparencia en las cuentas públicas, cuando a nivel cuantitativo del capital robado, el PSOE es con diferencia el partido más corrupto de la historia de España.
10º.- Dentro de su terminología derivada de la lucha de clases, defienden a la clase obrera frente a la burguesía, cuando históricamente y en la actualidad todos sus líderes son burgueses y provienen de la burguesía.
11º.- Defienden la igualdad de la mujer ante el hombre, cuando todos sus dirigentes son y han sido hombres. Por poner un ejemplo recurrente, en el primer Gobierno de Felipe González no había una sola mujer.
12º.- Defienden la homosexualidad como una parte de la libertad individual, cuando la homosexualidad ha sido reprimida en los países comunistas, y sus referentes históricos como el Che Guevara decía que la homosexualidad se curaba con el trabajo, o Salvador Allende que definía a los homosexuales como depravados.
13º.- Siempre se han decantado por lo que en su terminología se define como el “amor libre”, que considera que una mujer es libre de hacer lo que quiera con su cuerpo, mientras que una gran parte de la izquierda es partidaria de prohibir la prostitución.
14º.- Algo parecido ocurre con el aborto, que dentro de su eufemístico vocabulario denominan “interrupción voluntaria del embarazo”, en que bajo una lógica tan falsa como simplista, consideran que la madre tiene la libertad de disponer sobre la vida de su propio hijo, alegando como siempre que la mujer es dueña de su cuerpo, cuando abominan de la ablación de clítoris, cuando resulta evidente que ni el futuro niño quiere morir, ni la niña quiere que le amputen el clítoris.
15º.- El ideario marxista sostiene que el trabajo es la fuerza de la clase obrera, pero la izquierda moderna cuando ostenta el poder, se dedica a asfixiar a los trabajadores con impuestos que gravan la renta generada por su trabajo.
16º.- Los sindicatos –tradicionalmente de izquierdas- y la multiplicidad de asociaciones y chiringuitos que giran entorno a los partidos políticos de izquierdas, en vez de potenciar el valor del trabajo y la efectividad del esfuerzo individual, generan una legión de liberados sindicales y de vagos que viven de las subvenciones públicas.
17º.- De la religión es el opio del pueblo, se ha pasado a la veneración cuasi religiosa del líder ya sea Lenin, Stalin, Kim il-sung o Kim Jong-un, de una forma parecida a la de los emperadores romanos, que al ser considerados divinos era obligatorio adorarlos.
18º.- La izquierda siempre ha hecho gala de su ecologismo militante, estando omnipresente en los partidos políticos ecologistas que son casi todos de izquierdas, cuando han sido precisamente los países gobernados por la izquierda, los que han ocasionado los mayores desastres medioambientales como Chernobyl o la desecación del mar de Aral.
19º.- La izquierda se autodefine como no violenta, mientras los grupos antisístema, que también son de izquierdas, practican constantemente la violencia callejera y la subversión.
20º.- Gran parte de los partidos políticos, sindicatos y organizaciones de izquierdas, no han dudado en utilizar la violencia como acto político para conseguir sus fines por la fuerza, ya fuese por medio de huelgas salvajes, boicots, revoluciones o directamente golpes de Estado para tomar el poder por la fuerza.
21º.- Los políticos y la gente de izquierdas suelen abominar del terrorismo, cuando en el pasado han mostrado simpatías con las acciones de ETA, GRAPO, de las Brigadas Rojas o de la Fracción del Ejército Rojo (Bader Meinhoff).
22º.- La izquierda siempre se ha auto considerado a sí misma como pacifista y antimilitarista, cuando curiosamente Lenin definía al comunismo como la mezcla del militarismo alemán con la política de los soviets. No es óbice recordar que los países más destacados en la carrera armamentística, obsesionados con la acumulación de su arsenal y la movilización militar de gran parte de su población, han sido naciones gobernadas por la izquierda.
23º.- El pacifismo izquierdista siempre ha condenado las guerras en las que participaban países capitalistas, como la de Vietnam, y ha mirado para otro lado en la invasión soviética de Afganistán. En la misma línea de incongruencia, siempre han denunciado el imperialismo yanqui, pero nunca el imperialismo soviético que ha sido mucho más virulento, sobre todo en los países del Telón de Acero como Hungría o la antigua Checoslovaquia.
24º.- Se profesa una obsesión enfermiza por una memoria histórica que denuncia solo los crímenes de un bando, mientras se omite deliberadamente las matanzas proferidas por militantes de partidos de izquierdas.
25º.- Se defiende el principio de igualdad entre todas las personas, y simultáneamente se promueven políticas de discriminación positiva en detrimento de los nacionales frente a los extranjeros, y leyes de violencia de género que discriminan a los hombres frente a las mujeres.
26º.- Los partidos de izquierdas en sus programas electorales, defienden sistemas de puertas abiertas en materia de inmigración y el consabido “papeles para todos”, y cuando llegan al poder aplican la misma política de expulsiones que los partidos de derechas. Por ejemplo en España, gobiernos del PSOE han reforzado las vallas de Ceuta y Melilla.
27º.- Defienden la independencia de los medios de difusión social, y de todo lo relacionado con la cultura, cuando se dedican a conceder subvenciones a radios, televisiones, periódicos, cine y entidades culturales, para tener un control sobre ellos.
28º.- Se hace gala de políticas a favor de las personas pensionistas de avanzada edad, mientras se promueve y favorece la eutanasia.
29º.- Se denuncia el antisemitismo en los países occidentales, pero nunca se ha planteado las discriminación que ha sufrido la minoría judía en los países comunistas.
30º.- Ostentando una frivolidad y un cinismo increíbles, los dirigentes de izquierdas hablan constantemente del transporte sostenible y del uso popular de bicicletas, cuando muchos de ellos tienen coches de lujo, y casi todos sus altos cargos públicos no ofrecen reparos en la utilización de coches oficiales, hasta el extremo como ha ocurrido en España, de utilizar un avión Falcon a reacción para ir a un concierto de música.
Como colofón de estos treinta despropósitos contradictorios, se podría decir que lo que resume todos los anteriores, es que gran parte de las personas de izquierdas, con honrosas excepciones, sufren una manifiesta incapacidad de percibir que se convierten en aquello que pretenden combatir.
Juan Carlos Segura Just
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