Ahora que ha caído el FAQS, el programa de TV3 fetiche del separatismo — el que cada sábado marcaba la agenda del independentismo — y que personajes como Pilar Rahola lamentan su desaparición a causa de las presiones de «los políticos», no está de más recordar la ingente red de apoyo con la que cuenta la televisión de la Generalitat, la herramienta más poderosa del secesionismo. Porque tras el FAQS vendrán otros programas similares, porque TV3 no puede cambiar, mucha gente vive de su actual condición de altavoz separatista.
TV3 y la cadena de radio de la Generalitat, Catalunya Ràdio, gozan de cierta impunidad en su empeño en ser medios de propaganda secesionista gracias a la red de apoyo que los partidos y entidades independentistas han tejido alrededor suyo. No se trata solo de que buena parte de sus profesionales sean elegidos por su apoyo al separatismo. Además, esta red de complicidades hace casi imposible cuestionar, desde el nacionalismo catalán, el actual papel de los medios de comunicación de la Generalitat.
Muchos de los periodistas con peso en los grandes medios catalanes no solo son también independentistas, sino que además forman, han formado o aspiran a formar parte de la parrilla de TV3. Por ejemplo, desde el líder del programa radiofónico más escuchado en Cataluña, Jordi Basté; pasando por la omnipresente Pilar Rahola hasta los ‘Óscars’, Óscar Dalmau y Óscar Andreu, los dos humoristas más populares del panorama radiofónico catalán. Además, los dos directores de los dos grandes medios teóricamente no separatistas, también tienen son independentistas: Jordi Juan (La Vanguardia) y Albert Sáez (El Periódico).
El Colegio de Periodistas de Cataluña también está controlado por el secesionismo, y hasta la fecha el Consejo del Audiovisual de Cataluña (CAC), también lo está. La reciente renovación de este organismo ha vuelto a traer otra mayoría independentista en un organismo que debería ser independiente.
Algunas grandes productoras catalanas, como la de Toni Soler o Jaume Roures, que dan trabajo a un buen número de comunicadores separatistas con contactos en los partidos y asociaciones de este ámbito político, tienen una relación de simbiosis con TV3: generosos contratos a cambio de apoyar la línea independentista de la cadena.
Los medios de comunicación de la Generalitat no cambiarán, y seguirán siendo una herramienta a favor de la división entre catalanes y de propagación de rencor hacia el resto de España, mientras cuenten con esta poderosa red de apoyo.
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