La noticia no ha sido inesperada. Cuando Jordi Pujol Soley, allá en julio del año 2014, confesó haber robado a los catalanes, aunque el lo disfrazó con el cuento de una herencia y comenzaron las primeras investigaciones, ya sabíamos que no acabaría allí, sino que con el tiempo iría saliendo a la luz la gran fortuna que nos sustrajo.
Pero aún sabiéndolo, la noticia de ayer destapando la nueva fortuna del clan Pujol oculta en Andorra nos ha sorprendido. Y es que la banda era insaciable.
Mientras tanto, tenía que hacer calar en los catalanes el mensaje de “España nos roba», repitiéndolo durante años una y otra vez, a la vez que iba financiando por la puerta de atrás a CiU.
La banda del 3% y sus herederos políticos mantuvieron la impunidad durante muchos años y quieren seguir manteniéndola, aunque para ello sea necesario controlar la justicia. Un camino imposible de transitar porque, afortunadamente, nos encontramos en un Estado de Derecho que funciona perfectamente, donde el Poder Judicial es independiente. Pero ellos lo intentan con sus torticeras formas de actuar.
Y vamos viendo como los socios de gobierno de JxCat, ERC, que ostenta la Consejería de Justicia, desprecia con su dejación de funciones el ámbito judicial. Intentan degradar la justicia española con declaraciones que pretenden minar la confianza de los ciudadanos en la institución, miran hacia otro lado cuando se producen incidentes como el lanzamiento de excrementos en la puerta de juzgados y dejan de invertir en el mantenimiento de sedes judiciales imposibilitado así unas condiciones de trabajo dignas. Es evidente que esta lluvia fina de agravios sostenida en el tiempo hace que el destino de Cataluña no sea atractivo para jueces, fiscales y funcionarios y, en consecuencia, que cada vez haya más vacantes de jueces en Cataluña.
Este es ahora su “modus operandi», porque el objetivo final es conseguir lo que ya intentaron con su golpe de Estado los infames días 6 y 7 de septiembre, cuando quisieron imponer la ley de transitoriedad jurídica: poner a dedo a los jueces, controlando así la justicia y manteniendo su impunidad.
También les estorba cualquier ley que pueda facilitar la denuncia de la corrupción. Por eso han obstaculizado todo lo que han podido la tramitación de la Ley Anticorrupción que Cs presentó en enero, continuando con ese proceder altivo donde se imponen los privilegios que para ellos debe tener la clase política: vacaciones pagadas hasta el 16 de septiembre. Antes no se trabaja, y ningún otro partido político, salvo Cs, se opuso.
Es obvio que hay quien busca excusas para tapar la corrupción (JxCat y ERC), hay quién calla y otorga (PSC, Podemos y la CUP) y hay quién ni siquiera está ni se le espera… cómo el PP.
María Valle es diputada de Cs en el Parlament
Sergio Fidalgo relata en el libro 'TV3, el tamborilero del Bruc del procés' como a los sones del 'tambor' de la tele de la Generalitat muchos catalanes hacen piña alrededor de los líderes separatistas y compran todo su argumentario. Jordi Cañas, Regina Farré, Joan Ferran, Teresa Freixes, Joan López Alegre, Ferran Monegal, Julia Moreno, David Pérez, Xavier Rius y Daniel Sirera dan su visión sobre un medio que debería ser un servicio público, pero que se ha convertido en una herramienta de propaganda que ignora a más de la mitad de Cataluña. En este enlace de Amazon pueden comprar el libro.
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