Ciudadanos celebra este fin de semana su sexto congreso, el cual será recordado por el punto y final de Inés Arrimadas como presidenta del partido, una trayectoria marcada por los sonoros fracasos electorales.
Arrimadas ha llevado a cabo este sábado su último discurso como presidenta de Cs, y lo ha hecho para pedir “perdón” por los errores que haya podido cometer al frente de la nave naranja. La ya ex presidenta también ha querido tener un recuerdo para Albert Rivera, quien lideró el proyecto de Ciudadanos durante 13 años.
Arrimadas ha lanzado varias pullas a Edmundo Bal en forma de reproches indirectos. En esta línea ha aseverado que quienes se creen “más importantes” que el partido “son los más prescindibles“. Además, destaco que no se va a conseguir “remontar” el partido “peleándonos entre compañeros“. “No se puede combatir el cainismo en España matando a Abel todas las semanas“, ha sostenido la ex presidenta naranja.
Inés Arrimadas continuará como portavoz en el Congreso como ella misma ha remarcado, ha afirmado que da el paso de dejar la presidencia de Cs porque cree que el partido tendrá “más opciones” con “un cambio radical” en la dirección de un partido que tiene ante sí un complicado futuro.
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