La eurodiputada del grupo ALDE Teresa Giménez Barbat le ha hecho llegar al Síndic de Greuges catalán una queja ante la negativa del grupo de “Catalunya en Comú a sentarse junto a los partidos constitucionalistas en el Parlament de Catalunya”. A juicio de Giménez Barbat, “se trata de una actitud intolerablemente segregacionista, y que atenta contra la normal convivencia entre diputados de distinto signo que ha de caracterizar a las democracias”.
El texto de la carta es el siguiente:
“El sectarismo que impregna la vida política en Cataluña ha agrandado su infausto expediente a cuenta de la distribución de asientos en el Parlamento salido de las elecciones del 21 de diciembre. Según recogen algunos diarios, la formación Catalunya en Comú, liderada por Xavier Domènech, ha manifestado su rechazo a ubicarse en la bancada contigua a los diputados del PP, PSC y Ciudadanos. Tal es la molestia que, al parecer, les concita el roce con los representantes de dichos partidos (que lo son, no lo olvidemos, de centenares de miles de ciudadanos) que CenC ha pedido amparo a los partidos independentistas que éstos les faciliten el acomodo en el área donde se ubican, en una maniobra que recuerda el segregacionismo de quienes, siendo blancos, rehusaban mezclarse con negros.
No es, insisto, el primer episodio de esta índole que atenta contra lo que ha de ser la normal convivencia entre políticos de distinto signo. En este sentido, el llamado pacto del Tinell, uno de los capítulos más sombríos e inmorales de nuestra historia reciente, excluía la posibilidad de cualquier tipo de pacto de gobierno o acuerdo con el PP, lo que suponía, de facto, la estigmatización, cuando no el intento de muerte civil, de la formación conservadora.
Por ello, y en el deseo de que este tipo de conductas dejen de ser habituales o incluso normativas en nuestra comunidad, solicito su amparo.
Firmado:
Teresa Giménez Barbat”
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