El periodista Albert Soler, que publica habitualmente en el Diari de Girona, ha tirado de ironía, como es habitual en él, para definir la actuación del gobierno autonómico catalán, tanto de cara a la desescalada, como en los encuentros con familiares en domicilios particulares. Y lo ha hecho en redes sociales, en su perfil personal de Twitter.
«Por fin el gobiernito se dedica a solucionar los problemas importantes de los catalanes. Yo ya estaba harto de confundir mi vaso en la comida de Navidad con el del abuelo o el de la cuñada. Con la idea de ponerles adhesivos para distinguirlos, nuestra vida de de cambiar. ¡Gracias gobiernito!» ha dicho en referencia a la sugerencia de la Generalitat de marcar con pegatinas los vasos en los ágapes familiares para diferenciarlos.
Otra medida que ha despertado el interés de Soler es como la Generalitat prefiere dividir la desescalada en «tramos», en vez de en «fases», como hizo el Gobierno de España.
«Que las medidas de desescalada del gobiernito hayan conseguido enfadar a todo el mundo (restaurantes, cultura, deporte…) es igual. Lo importante es que en Cataluña, las fases no se llaman fases, sino tramos, y esto nos hace ser diferentes. ¡Seguimos! ¡Viva los tramos!», ha comentado Soler en redes.
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