El próximo domingo el constitucionalismo catalán volverá a salir a la calle para protestar contra la amnistía que negocian el Gobierno en funciones de Pedro Sánchez y el prófugo Carles Puigdemont.
Se espera que la convocatoria sea masiva en las calles de Barcelona, cabe recordar que la manifestación ha sido organizada por Societat Civil Catalana y que la práctica totalidad de las entidades constitucionalistas se han sumado a la misma. Y es que el momento requiere de la máxima movilización de la sociedad para dejar claro que los separatistas no pueden hablar en nombre de todo el pueblo catalán.
El Govern de Pere Aragonès, ya se ha encargado de insultar a todos los catalanes que libremente decidan acudir a la manifestación de este próximo domingo en la capital catalana. La portavoz del ejecutivo catalán, Patrícia Plaja, ha dicho que la concentración no es más que una reunión de aquellos que «van en contra de los catalanes, que no quieren construir y que critican todo aquello que sale de Cataluña«.
La definición que emplea el Govern separatista para referirse a la concentración de Societat Civil Catalana es la de «catalanófobos«. En cualquier otro lugar del mundo civilizado, un gobierno no insultaría a buena parte de sus ciudadanos por acudir a una manifestación, pero en la Cataluña secesionista, todo vale. Sumamos motivos para acudir en masa este domingo.
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