Toni Albà, que fue durante más de una década una de las estrellas de TV3 – la televisión de la Generalitat catalana -, sobre todo en el programa cómico producido por Toni Soler ‘Polònia’, ha mostrado su rencor hacia el expresidente de la Comunidad Autónoma de Aragón, Javier Lambán (PSOE), que ha fallecido hace unas horas tras una larga enfermedad.
Esta deleznable reacción ha motivado que varios de los referentes del constitucionalismo catalán hayan mostrado su rechazo hacia uno de los cómicos más mimados por los medios de comunicación separatistas, incluyendo los públicos. Si Albà es alguien en Cataluña es gracias a TV3, que le dio una gran popularidad. Sobre todo imitando al entonces Rey, Juan Carlos I.
El ex diputado autonómico y eurodiputado por Ciudadanos Jordi Cañas ha definido la reacción de Albà como «ejemplo del odio que supura la Cataluña separatista» y le definió como uno «humoristas» a «las órdenes de los hispanófobos supremacistas habituales del Régimen». Y aventuró que en breve este tipo de personajes «supurarán su pus separatista en RTVE Cataluña».
El presidente de Convivencia Cívica Catalana, Ángel Escolano, ha dicho que Albà es «basura humana. De la que va al contenedor de la orgánica. Y la empresaria Ignacia de Pano, que colabora en medios como Voz Pópuli y Esradio, dijo de él que «es tan feo por dentro como por fuera. El estreñimiento hecho carne despreciable. Basura».
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Sergio Fidalgo relata en el libro 'TV3, el tamborilero del Bruc del procés' como a los sones del 'tambor' de la tele de la Generalitat muchos catalanes hacen piña alrededor de los líderes separatistas y compran todo su argumentario. Jordi Cañas, Regina Farré, Joan Ferran, Teresa Freixes, Joan López Alegre, Ferran Monegal, Julia Moreno, David Pérez, Xavier Rius y Daniel Sirera dan su visión sobre un medio que debería ser un servicio público, pero que se ha convertido en una herramienta de propaganda que ignora a más de la mitad de Cataluña. En este enlace de Amazon pueden comprar el libro.
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