En los días previos a la presentación de enmiendas a las dos ponencias que se presentan en la V Asamblea (o Congreso) extraordinario convocado a causa de la dimisión del Presidente Albert Rivera, han sucedido cosas digamos curiosas tanto por parte de la Gestora, como de la portavoz en el Congreso de los Diputados, Inés Arrimadas.
Por un lado la Gestora ha cesado a 60 cargos internos del Partido y lógicamente nombrados sus sustitutos, cuando una Gestora debe ocuparse únicamente del día a día del Partido a la espera del resultado del V Congreso y de la elección del presidente/a y al nombramiento del nuevo Comité Ejecutivo.
Por otro se ha originado una confrontación en Medios entre los que son favorables a la propuesta de la Comisión de Estatutos y los que han presentado una enmienda a la totalidad por entender estos últimos que la propuesta oficialista no tiene en cuenta a las bases.
Además Inés Arrimadas, sin más cargo que Portavoz del Grupo Cs en el Congreso de los Diputados, se arroga (o se le confiere) el trato de presidenta del Partido, cosa que no es, por lo menos aún no.
Negocia coaliciones electorales, realiza actos de Partido que en realidad son para hacer su propia campaña, y en la votación para compromisarios se usa el hashtag #yoconines o la frase “Con Inés unidos y adelante” convirtiendo así la votación de los estatutos en un plebiscito sobre Inés Arrimadas, cuando la elección para la presidencia del Partido es una votación separada, y como ha dejado claro que si se aprueba la enmienda a la totalidad ella no querrá ser la presidenta, lo que parece pretender es obligar a votar en contra de la enmienda a la totalidad a aquellos que quieren que sea la presidenta.
Reconozco que es más fácil y cómodo controlar un partido en que casi todos los cargos internos del Partido son elegidos por el Comité Ejecutivo que nombra el presidente/a, pero Ciudadanos-Ciutadans nació para traer democracia y transparencia a la política y también a los Partidos; creo que Inés debe escuchar y dar protagonismo a las bases pues de otro modo se repetirán los errores hasta llegar a la desaparición o absorción del Partido, más pronto, que tarde.
Transversal No Nacionalista
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