El Partido Popular ha recuperado posiciones en el mapa municipal catalán tras la debacle de las elecciones municipales de 2019, en la que se quedó fuera de consistorios tan importantes como los de Sabadell, Terrassa, Santa Coloma de Gramenet o Lérida, y consiguió representación por los pelos (con un escaso margen de medio centenar de votos) en el Ayuntamiento de Barcelona.
La formación que lidera Alberto Núñez Feijóo ha conseguido subir en Barcelona, dado que su candidato, Daniel Sirera ha pasado de dos a cuatro regidores. En la segunda ciudad de Cataluña, L’Hospitalet de Llobregat, la alcaldable Sonia Esplugas ha pasado de uno a cuatro regidores. También ha conseguido recuperar la representación en Sabadell (un regidor), Terrassa (dos regidores) y Santa Coloma de Gramenet (dos regidores), entre otras muchas ciudades.
En Badalona y Castelldefels los candidatos populares han vuelto a ganar las elecciones, como ya hicieron en 2011, 2015 y 2019. Xavier García Albiol ha arrasado y ha pasado de once a dieciocho regidores en Badalona y Manu Reyes ha sumado cuatro regidores a los ocho que ya tenía en el pleno municipal de Castelldefels.
En las otras tres capitales catalanas también han mejorado resultados. En Gerona Jaume Veray ha pasado de cero a un regidor. En Tarragona Maria Mercè Martorell ha pasado de dos a cuatro regidores. Y en Lérida Xavier Palau ha tenido una fuerte subida y ha pasado de dos a cinco regidores.
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