El gobierno autonómico catalán, en vez de ayudar a los agentes económicos a que Cataluña sea más próspera, se dedica a la agitación. Los partidos secesionistas perjudican las finanzas de nuestra comunidad por su mala gestión, su derroche del dinero público y por la agitación callejera que periódicamente provocan, con graves disturbios.
Los inversores, sobre todo los extranjeros, buscan estabilidad para poder prosperar, no tener problemas. Apuestan por administraciones públicas que creen condiciones favorables para crear riqueza, no por políticos deseosos de dinamitar la convivencia. Como Pere Aragonès, que plantó en el 70º aniversario de SEAT a la cúpula mundial de Volkswagen. O recordemos a Quim Torra y su ruego de «apretad» que le dijo al sector más violento del independentismo.
Cataluña pagará durante décadas las barbaridades económicas de los partidos secesionistas. La decadencia de nuestra economía parece imparable con un gobierno autonómico empeñado en destrozar la convivencia y creando unas condiciones infernales para los inversores.
(NOTA: En estos momentos de crisis y de hundimiento de publicidad, elCatalán.es necesita ayuda para poder seguir con nuestra labor de apoyo al constitucionalismo y de denuncia de los abusos secesionistas. Si pueden, sea 2, 5, 10, 20 euros o lo que deseen hagan un donativo aquí).
no recibe subvenciones de la Generalitat de Catalunya.
Si quieres leer nuestras noticias necesitamos tu apoyo.