Esta semana los pinganillos han llegado de manera oficial al Congreso de los Diputados para jolgorio de los separatistas, que una vez más han logrado poner de rodillas al Gobierno en funciones de Pedro Sánchez.
Los independentistas y nacionalistas exigen la utilización de los idiomas regionales en la cámara baja, mientras en sus distintas comunidades autónomas imponen el monolingüismo. O en el mismo Congreso de los Diputados. Os contábamos este pasado viernes como la consellera de Cultura de la Generalitat, Natàlia Garriga, se negaba a contestar preguntas en castellano, durante una rueda de prensa en el Congreso y pese a la petición expresa de los periodistas.
Pero el ejecutivo de Sánchez ha abierto una caja de pandora que veremos donde acaba, conociendo la ambición de los separatistas. Los compañeros de Libertad Digital informan que los pinganillos comienzan a llegar también a las tutorías escolares.
Varios alumnos de colegios del área de Barcelona han comenzado a recibir el siguiente mensaje: «El curso pasado pediste a la escuela que todas las comunicaciones que recibieras en relación a tus hijos/as fueran en catalán y en castellano. Teniendo en cuenta esta petición, las entrevistas individuales con los tutores y tutoras de tus hijos/as también las tendremos que ir traduciendo«. Y además, les advierten de que «en caso de no querer que sea así, necesitaríamos que firmaras esta renuncia«.
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