Dentro de las negociaciones para formar Gobierno uno de los elementos clave es la elección de la Mesa del Congreso, el organismo que gobierna la Cámara baja. Y el puesto más preciado es la presidencia, que hasta ahora estaba detentada por Meritxell Batet.
Joan López Alegre en un artículo en ‘Economía Digital’ da las claves sobre la importancia de esta negociación: “El PSOE también está dispuesto a ceder la presidencia del Congreso y ahí está la clave de la renuncia de Meritxell Batet, pero es difícil decidir a quien entregar el sillón más noble del congreso porque sus socios se miran de reojo entre ellos”.
Asegura que la presidencia no puede recaer en el PNV “para que no se altere Bildu”. Tampoco para Junts “para no enfadar a ERC y viceversa”. Y Sumar también tiene sus rencillas dentro del amplio grupo de partidos que la conforma. Por lo que López Alegre apuesta por “Gerardo Pisarello, secretario primero de la mesa del congreso actual y persona de confianza de Ada Colau, que apunta a ministra de Vivienda si Sánchez consigue el placet para seguir siendo presidente”.
Gerardo Pisarello protagonizó un lamentable incidente durante las fiestas de la Mercè de 2015. Con la plaza de Sant Jaume llena el entonces portavoz de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Coronas, colgó una bandera independentista en el balcón del edificio consistorial. El entonces regidor del PP Alberto Fernández Díaz pidió sin éxito su retirada y reaccionó colocando a su vez una bandera española en el balcón a trompicones, pues Pisarello intentó evitarlo, provocando un forcejeo.
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