El 1 de octubre de 2017 el independentismo convocó una consulta ilegal, un intento de golpe de Estado en toda regla.
El secesionismo y sus líderes trataron de hacer saltar por los aires el Estado de Derecho de nuestro país con una consulta que no cumplía ninguna regla democrática y donde se demostró que hubo independentistas que votaron hasta tres y cuatro veces. Un auténtico despropósito.
Las consecuencias de aquella consulta ilegal ya las conocemos, líderes secesionistas en prisión y posteriormente indultados por un Gobierno que los necesita para gobernar el país.
Durante aquellos días cabe recordar como los independentistas trataban las urnas utilizadas durante aquella consulta como una herramienta histórica, pero aquella épica ha dado paso a utilizarlas como simples regaderas, así lo ha hecho nada más y nada menos que la ex presidenta del Parlament, la indultada Carme Forcadell.
“Con el alcalde de Prats de Molló regando el manzano que plantamos el año pasado junto al monumento para homenajear a los represaliados y represaliadas de ayer, hoy y mañana“, escribía Forcadell en su cuenta de Twitter. Muchos independentistas le han afeado que utilizará una ‘mítica’ urna del 1-O para regar un arbolito.
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