Fue en la localidad tarraconense de Torredembarra. Una mujer se puso a plena luz del día a quitar los lazos amarillos que los secesionistas usan para marcar el territorio como suyo. Decidió que estaba harta que el plástico contaminante ensuciara los árboles y las calles.
Se puso sin complejos a limpiar la vía pública, y desde los balcones comenzó a recibir insultos de todo tipo por parte de partidarios de la «revolución de las sonrisas» que aseguran que en Cataluña no hay tensión social de ningún tipo.
Ante los insultos constantes y con mala leche por parte de un señor de avanzada edad que decidió que una señora no merece ningún respeto, la valiente constitucionalista, con salero y sin insultar, le propina un ‘zasca’ histórico.
Unos insultan y llenan la vía pública de basura de color amarillo, plástico contaminante. La Generalitat nos obliga a pagar las bolsas de plástico para desmotivar su uso y así beneficiar al medio ambiente.
Y al mismo tiempo promueve que toneladas de basura llenen las calles. Por suerte hay otros que la retiran para que el medio ambiente sea más respirable.
Puede comprar el último libro de Sergio Fidalgo ‘Usted puede salvar España’ en este enlace de Amazon. Y ‘El hijo de la africana’ de Pau Guix en este enlace de Amazon.
no recibe subvenciones de la Generalitat de Catalunya.
Si quieres leer nuestras noticias necesitamos tu apoyo.