Ser de Barcelona ya no es lo mismo que solía ser antes, el barcelonés ahora se apellida Xuan, Asghar, Chong, Muhammad, Bernard pero nació en Francia; García, pero nació en Colombia; Puig y Carbonell pero nació en Cuba.Pero también siguen aquí los hijos y nietos de extremeños, andaluces o gallegos. Ahora una catalana de madre alemana y padre catalán, se casa con un blanco sudafricano, y un inglés de origen esrilanqués se enamora de una cubana, un catalán de 8 apellidos rompe el linaje casándose con una negra africana y hasta tienen hijos, unos mulatos hermosos que se llaman Jordi y Laia Puig Lubumba.
Un barcelonés que emprende y paga impuestos, habla inglés, pakistaní, italiano, o francés, sus hijos nacieron aquí, y hablan español, catalán y el idioma de sus padres, a veces hablan dos porque la mamá es de Rusia y el papá es de la India. Barcelona es un crisol de naciones y culturas, Barcelona sigue siendo una especie de Hispanidad moderna. Somos casi un millón de residentes legales, y desde 2013 en toda Cataluña 754.839 dieron el paso de hacerse españoles, y estoy seguro que muchos de estos viven en esta gran ciudad.
Aquí hemos aprendido sobre la libertad, el progreso, y de seguridad. Hay países de Hispanoamérica que no puedes ir con tu móvil en la mano por la calle, porque sencillamente te lo quitan, o una pandilla te impide el paso por su barrio si no le pagas un impuesto. Lamentablemente, en la Barcelona de Inmaculada Colau parece que estamos viviendo de nuevo, en nuestros barrios inseguros, barriadas de las que salimos huyendo para darle un futuro mejor a nuestros hijos, y a veces acabamos pagando justos por pecadores, las acciones de otros. Asunto que no nos gusta, porque a nosotros también, nos roban, nos atracan, intentan violar a nuestras hijas, ocupan nuestras viviendas, o locales. Algunos de nosotros, somos emprendedores y damos empleo a trabajadores, y cuando suben los impuestos, y controlan aspectos de los negocios, también nos pasa a nosotros.
Cuando digo que “la gente de Barcelona es lo primero” hablo de todos los que antes mencioné, y los que vendrán a querer ser de aquí por qué esto no va a parar. La Sagrada Familia, o el Parque Güell también son nuestros, enseñamos estos lugares con orgullo a nuestras familias cuando vienen de visita. Muchos de nuestros hijos son culés, amamos la crema catalana, el Vichy, los calçots, y hasta las sardanas, también es nuestra la rumba catalana, y disfrutamos de las infraestructuras que nos dejó Barcelona 92.
La gente de Barcelona es lo primero, porque Barcelona es de los que estaban, de los vienen, y de los que vendrán. A ti, nuevo español que me lees, a ti extranjero residente que me lees, tienes que participar en el destino de esta ciudad, no puedes seguir siendo un mero espectador. Quién te diga que no puedes participar en el destino de Barcelona es porque no quiere entender que el tablero del juego ha cambiado, y que sí, algunos de nosotros limpiamos el suelo y cuidamos a viejos, pero también somos abogados, ingenieros, artistas y escritores, y cualquier cosa que se legisla para locales, igualmente nos afecta positiva o negativamente, porque NOSOTROS SOMOS LOCALES.
Sobre todo, no apuestes por las mismas políticas que te hicieron huir de tu nación, no seas pringao, que el Síndrome de Estocolmo no te atrape. Únete a la transformación de esta ciudad hispano-cubana, hispano-colombiana, hispano-francesa, hispano-china, hispano-africana, hispano-pakistaní, porque “la Gente de Barcelona es lo primero” y tú y yo somos barceloneses.
Sayde Chaling-Chong García, hispano-cubano
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