Tras años y años de abusos, insultos y manipulaciones seguro que están hasta las narices del tema de TV3, y su acción como herramienta al exclusivo servicio del separatismo más radical. No lo hagan, no normalicen con su cansancio el que es uno de los peores escándalos que ha sufrido nuestra democracia, un medio que siembra rencor, y que lo pagamos todos los ciudadanos.
TV3 no es un caso más de intervencionismo gubernamental en un medio público. Por mucho que les venga a la mente los casos de TVE, Canal Sur, Telemadrid, ETB, TVG o Canal 9, por poner algunos ejemplos, no tiene nada que ver. En estas cadenas simplemente el gobierno de turno, fuera central o autonómico, solo buscaba conseguir propaganda gratis, o tapar sus miserias. Estos comportamientos son reprobables, porque la radio o la TV pública solo tienen sentido si están al servicio de todos los ciudadanos.
Pero lo de TV3 es algo mucho más siniestro, es una herramienta de ingeniería social, que tiene como fin conseguir que millones de catalanes sientan a España y todo lo español como algo ajeno. Y están haciendo su labor con eficacia. Por eso no hay que cejar en denunciar sus excesos, tanto en España como a nivel internacional.
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Sergio Fidalgo relata en el libro 'TV3, el tamborilero del Bruc del procés' como a los sones del 'tambor' de la tele de la Generalitat muchos catalanes hacen piña alrededor de los líderes separatistas y compran todo su argumentario. Jordi Cañas, Regina Farré, Joan Ferran, Teresa Freixes, Joan López Alegre, Ferran Monegal, Julia Moreno, David Pérez, Xavier Rius y Daniel Sirera dan su visión sobre un medio que debería ser un servicio público, pero que se ha convertido en una herramienta de propaganda que ignora a más de la mitad de Cataluña. En este enlace de Amazon pueden comprar el libro.
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