
El ambiente en Cataluña es irrespirable para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Según informa LA RAZÓN casi el 30% de los agentes de la Policía Nacional en Cataluña han pedido su traslado.
Los radicales secesionistas han convertido Cataluña en un terreno de batalla insostenible para los agentes y sus familias, que habitualmente sufren en silencio actos de acoso y desprecio.
En total en la comunidad autónoma de Cataluña hay unos 2.800 agentes, y unos 800 de ellos ya habrían pedido su traslado fuera de tierras catalanas. Los puntos más álgidos de violencia secesionista se vivieron después de la sentencia por el proceso independentista cuando los radicales la emprendieron contra la Jefatura de la Policía Nacional en Vía Laietana.
La mayoría de los agentes que han solicitado su marcha son personas naturales de otros puntos de España y que ante la posibilidad de marcharse no se lo piensan.
Uno de estos agentes lo explica de forma muy clara “ahora se vive algo similar a lo que en su día se vivió en el País Vasco, donde no podías casi indentificarte como policía. Y todo suma, si al final la mayor parte son de otras partes de España, prefieren irse“.
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