Durante la manifestación feminista y anticapitalista que ha reunido a un millar de personas en la zona alta de Barcelona un vecino ha difundido en redes un vídeo en el que se ve a un grupo de violentos reventando a golpes de mazo el escaparate de una entidad bancaria.
Los radicales también han arrasado un concesionario de vehículos de alta gama, destrozando la cristalera y causando daños en el interior. Han circulado en redes numerosas fotografías sin firmar reproduciendo los desperfectos causados.
Desde la zona de Vía Augusta han ido vandalizando comercios y bancos hasta plaza Molina, ante la pasividad de varias furgonetas presentes de los Mossos d’Esquadra que apenas han intervenido durante un buen rato, mientras se multiplicaban los destrozos.
Algunos participantes, para evitar que se grabaran imágenes de los destrozos han increpado a viandantes que intentaban grabar imágenes con el móvil y les han increpado para que no lo hicieran, e incluso han intentado evitarlo encarándose con los vecinos.
Estos disturbios se producen al día siguiente de la jornada de protestas contra la entrada de prisión del rapero Pablo Hasél, que provocaron enfrentamientos entre los Mossos d’Esquadra y algunos radicales secesionistas y antisistema, aunque con menor intensidad que en otros días.
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