Los telediarios de TV3 son informativos dedicados a la propaganda separatista pero siguen creando tendencia y son la referencia para centenares de miles de catalanes y a menudo marcan la agenda política de la comunidad autónoma. Y es que la cadena de la Generalitat, gracias a su potencia económica continua siendo el medio local por excelencia. Por supuesto que en Cataluña se ve mucha televisión nacional, y los canales de Atresmedia, Mediaset, TVE y otros como 13TV o El Toro TV atraen en conjunto a la mayoría de los catalanes.
Pero TV3 sigue siendo la gran televisión en catalán, por mucho que 8TV, la cadena que ha comprado el empresario italiano Nicola Pedrazzoli, intente ser una alternativa. Este medio privado queda muy lejos de la influencia y de la cuota de pantalla que tiene la Corporación Audiovisual de la Generalitat, por mucho que esté fichando a personajes importantes del mundo separatista como Pilar Rahola, Vicent Sanchis o Eduard Pujol.
Que TV3 sea el medio más potente del panorama audiovisual catalán plantea un grave problema. Sin una alternativa potente a nivel autonómico en el sector privado que le haga de contrapeso, y con un circuito catalán de TVE que solo compite con la televisión de la Generalitat en unas franjas horarias muy limitadas, el campo de la información local, a base de reportajes, noticias, tertulias y programas de entrevistas en la pequeña pantalla está bajo el control de los directivos de TV3.
El panorama de medios audiovisuales ‘autóctono’ de Cataluña está compuesto por los canales de la televisión de la Generalitat, la ya mencionada 8TV y una miríada de pequeñas emisoras locales sin apenas medios ni audiencia. ¿Cuál es la consecuencia? Que a pesar de su desprestigio, los servicios informativos y de propaganda de TV3 siguen teniendo mucha fuerza. Una parte importante de los catalanes quiere ver en la pequeña pantalla temas relacionados con la actualidad autonómica, y por mucho que parte de la población haya ‘desconectado’ de esta cadena pública, la falta de una alternativa potente hace que siga manteniendo un importante público cautivo.
El centro emisor de TVE Sant Cugat tiene unas instalaciones magníficas, pero se ha convertido en una alternativa fallida a TV3, más que nada porque hace seguidismo de la Televisión de la Generalitat, a menudo fichando a personajes que provienen de esta cadena, como Óscar Dalmau. No ha habido voluntad política para crear una alternativa fiable, neutral y, sobre todo, que no sea una mala copia de la Televisión de la Generalitat. El panorama de los medios de comunicación públicos en Cataluña es descorazonador.
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