El presidente del Gobierno y líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, ha admitido haber recibido dinero en efectivo de la sede de Ferraz. Lo ha reconocido durante su comparecencia ante la comisión de investigación del Senado sobre el denominado ‘caso Koldo’.
Esta declaración se produjo en el arranque de su interrogatorio, a preguntas de la senadora de UPN, María Caballero. Sánchez fue directo en su respuesta, aunque minimizó el alcance de estos cobros. «En alguna ocasión he liquidado gastos con factura», afirmó el presidente, intentando encuadrar estos pagos dentro de la «financiación absolutamente regular» del partido. La mención a los «sobres» en efectivo eleva la tensión en la Cámara Alta.
El líder socialista, sin embargo, se apresuró a negar cualquier irregularidad. Sostuvo que el importe recibido nunca superó la cifra de 1.000 euros. De esta forma, asegura, se respetaba la legislación sobre pagos en metálico. Sánchez rechazó categóricamente la existencia de «sobresueldos» dentro del PSOE. Buscó así marcar distancias con las acusaciones que históricamente han rodeado a otros partidos sobre pagos opacos a sus dirigentes.
Su testimonio colisiona, además, con las informaciones que apuntan a una contabilidad poco transparente. El presidente insistió en que el partido «no tiene pagos sin documentar». Esta afirmación choca directamente con las pesquisas de la Guardia Civil en el ‘caso Koldo’. La Unidad Central Operativa (UCO) ha investigado el patrimonio de José Luis Ábalos, exministro de Transportes y ex número tres del PSOE.
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