El independentismo es un mundo trufado de frikis, dispuestos a celebrar cualquier ‘hazaña’ por ridícula que sea, lo que si hay que reconocerles es su perseverancia, y además de no tener ningún tipo de sentido del ridículo, al César lo que es del César.
Este pasado jueves se cumplía el quinto aniversario del Golpe de Estado que los separatistas trataron de dar en Cataluña, un día negro en la historia de la comunidad autónoma catalana. La declaración unilateral de independencia duró ocho segundos.
Pues bien, un grupo de secesionistas convocados por la entidad ‘Catalans per la Independència‘ ha organizado una marcha con antorchas por Barcelona que ha ido desde el Parlament hasta la plaza San Jaime de la capital catalana. A duras penas han logrado congregar a un centenar de personas.
Los radicales han entonado cánticos en favor de la independencia de Cataluña, contra España y contra el actual presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. Además, en la cabecera portaban una pancarta donde se podía leer «No os volveremos a votar«.
El prófugo Puigdemont también quiso decir la suya desde su ‘exilio’ dorado en Waterloo, desde donde aseguró que la no aplicación inmediata de la DUI «no anula su vigencia» y «obliga a buscar la manera de desplegarla desde las instituciones autonómicas o republicanas. Es una vía que no se ha intentado y por la que obtuvimos hace cinco años el apoyo del Parlament«.
L’entitat Catalans per la Independència reclamen la vigència de la declaració d’independència en el seu cinquè aniversari davant el #Parlament. Desenes de manifestants inicien una marxa mb torxes fins a plaça #SantJaume pic.twitter.com/DhSvNhy5AU
— Oriol Freixenet (@Ofreixenet) October 27, 2022
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