Barcelona y Cataluña se hunden de la mano mientras la ciudadanía parece aletargada viendo como la comunidad autónoma y su capital van perdiendo posiciones de forma alarmante.
El independentismo y el populismo se han dado la mano para hundir económica y socialmente a los catalanes, con políticas provincianas que han espantado a las inversiones y han incentivado la huida de empresas y turistas.
En esta ocasión, la voz de alarma la han dado los hoteleros, quienes han puesto en su punto de mira a la alcaldesa Ada Colau.
«No invertimos en hoteles en Barcelona porque la gestión de la alcaldesa Ada Colau nos parece dantesca. Barcelona no pasa ya del 35% de ocupación. En Madrid ya estamos en el 88%. Los estadounidenses están borrando del mapa a Barcelona. Madrid es una ciudad europea. Barcelona, en cambio, es un absoluto desastre. La verdad es que Madrid es un destino que nada tiene que envidiar a Londres ni a París. Apostamos firmemente por Madrid debido a sus extraordinarias infraestructuras, su inmejorable oferta cultural y de ocio, su estabilidad jurídica y la seguridad jurídica que ofrece», ha sostenido Antonio Catalán, presidente de AC Hoteles. Poco más que añadir.
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