La situación económica en Cataluña es preocupante, y en esta ocasión hablamos de la provincia de Lérida, donde los empresarios han dado la voz de alarma.
Los datos hablan por si solos. Entre el 2015 y el 2020, 428 empresas leridanas se fueron a Aragón, Barcelona o Madrid.
Dos de estos empresarios son Jordi Serrate y David Valls, ambos ya han abandonado la provincia ilerdense para instalarse en Aragón. En declaraciones a La Vanguardia, Valls afirma que «nos trasladamos de Benavent de Segrià a Fraga por culpa de la falta de suelo disponible, las trabas burocráticas y el escaso interés de la administración para retenernos en el territorio. En Aragón, todo es más fácil”.
Un estudio de la UdL y la UPF-BSM bajo encargo de la Cambra de Comerç de Lleida, confirma que un total de 428 empresas han abandonado la provincia entre el 2015 y el 2020, una cifra que supone el 3,2% del tejido empresarial. Las alarmas se han encendido.
Foto: Wikipedia
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