Este lunes Barcelona ha amanecido en la fase 1 del desconfinamiento, con lo que los bares y restaurantes podía abrir sus puertas y terrazas.
Según datos del gremio de restauración el 60% de los locales han decidido no abrir hasta entrar en la fase 2 de la desescalada. En Barcelona hay unos 3.300 locales sin terraza.
El Gremio apunta que el 70% de las terrazas tiene cuatro mesas o menos y que, con la restricción del 50% del aforo, muchos negocios no son viables. Por otra parte, el gremio pide ampliar al 50% el aforo interior permitido en fase 2.
El director del gremio de restauración Roger Pallarols considera que la reapertura de este lunes ha sido tímida, aunque la valora de forma positiva para el gremio, ya que Barcelona no podía seguir estancada económicamente.
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