“Es necesario hacer efectivo un plan a cuatro años vista para la eliminación gradual de los barracones escolares que hay en Catalunya y que únicamente se puedan utilizar en situaciones muy específicas y durante un tiempo muy limitado que, en cualquier caso, no exceda los dos años académicos”. Así se ha pronunciado el portavoz de Ciudadanos (Cs) en el Parlament de Catalunya, Nacho Martín Blanco, para exigir al Govern de la Generalitat la puesta en marcha de una planificación para la eliminación sistemática de los barracones escolares que existen en Catalunya (1.006) en cuatro años. Para ello, ha registrado una propuesta de resolución parlamentaria en la que pide la redacción de un informe anual especificando el número de barracones existentes, las escuelas con estas insatalaciones y el número de alumnos afectados.
“Además de la inmersión lingüística, una de las grandes lacras del sistema educativo catalán son los barracones, que han pasado de los 527 existentes en 2003 a los 1.006 actuales, sin que ningún Govern de la Generalitat haya hecho nada para solucionarlo”, ha manifestado el diputado autonómico. Para Martín Blanco, la “falta de planificación” de los sucesivos gobiernos autonómicos es significativa, “hasta el punto que hay alumnado que jamás ha conocido alguna otra realidad que no sea dar clases en módulos prefabricados”. El problema está tan agravado que 93 escuelas públicas catalanas funcionan íntegramente con módulos prefabricados y en otras 442 hay algún barracón instalado en su recinto.
Añade que “los inconvenientes” de este tipo de escuelas deben atajarse de forma urgente porque, más allá de las diferencias que perciben los alumnos escolarizados en barracones respecto de los que lo están en aulas tradicionales, la imagen indirecta que se percibe es que las escuelas emplazadas en barracones “favorecen la segregación al dar una imagen de escuela pública asociada a recursos escasos y aleja a muchas familias de la preferencia de elección de esos centros”.
Es por todo ello que Cs exige el plan de eliminación de barracones en cuatro años y pide que se realice una planificación a largo plazo “según las necesidades demográficas del territorio para evitar la puesta en funcionamiento de nuevos módulos prefabricados”.
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