“No estamos ni queremos estar en su falso consenso por narices, somos y seremos la voz discrepante, la única si hace falta”. Así lo ha dicho la portavoz de Ciutadans (CS) en el Parlament de Cataluña, Anna Grau, en relación con las conclusiones de la cumbre sobre la educación que se celebró este martes. El partido naranja ha presentado y defendido en el Pleno un decálogo alternativo al del Govern, con diez medidas de choque entre las que se encuentran ‘dinamitar’ la inmersión lingüística, acabar con el modelo de fracaso de la escuela catalana, poner fin a los barracones, reducir la precariedad de la plantilla docente pública y defender también a la escuela concertada.
“Que es un modelo caduco y de fracaso no lo digo yo, lo dice PISA. Pero a ustedes les da igual PISA, la misión de observadores de la UE y todo. No quieren reformar su modelo por mucho que fracase, lo quieren blindar”, ha afirmado Grau. “Nosotros nos queremos cargar la inmersión porque es una injusticia, una estafa, una vulneración de los derechos fundamentales”.
La portavoz de CS en Cataluña ha invitado al resto de fuerzas políticas a “ponerse las pilas y no de perfil”. En esta línea, ha apelado al Partido Popular para que le expliquen a Feijóo que el bilingüismo cordial no existirá en Cataluña hasta que “sea una prioridad para ustedes, como lo es para nosotros, dinamitar el modelo de inmersión y de ingeniería social del independentismo”. Al PSC le ha pedido que “no sean rehenes de Sánchez” y que actúen con un mínimo de objetividad y seriedad.
Grau ha acusado a la Consellera de Educación de mandar comisarios políticos para controlar e incidir en los encuentros con la misión europea que vino a Cataluña a investigar la inmersión lingüística. “Los miembros de esa misión se han quejado en público y en privado y han dicho que en su vida nunca habían visto nada igual”, ha asegurado Grau.
En su intervención Grau ha hecho referencia a un fragmento del comunicado emitido por AEB y Docentes Libres valorando la visita de la comisión de eurodiputados: “lamentamos que el desarrollo de la misión del Parlamento europeo se haya llevado a efecto en un clima de hostilidad hacia los eurodiputados” y “consideramos improcedentes los insultos que han recibido y las presiones con las que se ha intentado entorpecer su actividad parlamentaria”, ha manifestado en voz de las entidades constitucionalistas. “No se tapen los oídos, les vendrá bien escuchar esto: sin Ciutadans, sus voces nunca atravesarían los muros de silencio ni la burbuja política en que vive la mitad de este Parlament”, ha sentenciado.
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