Un político ocupa un cargo público para solucionar los problemas de los ciudadanos, pero no siempre es así, en más de una ocasión es la clase política la que se dedica a generar problemas, donde realmente no existen. Luego están los políticos independentistas, que son especialistas en vivir en una realidad paralela, en un procesismo que les va muy bien para seguir ganando dinero a costa de ir engañando a los ciudadanos.
Este podría ser perfectamente el caso del diputado de Junts, Joan Canadell, quien a través de un tuit ha dejado claro que vive muy alejado de la realidad. Canadell ha pedido en sus redes sociales que los ciudadanos catalanes vivan en una realidad paralela, como si Cataluña ya fuera Estado.
Y ha solicitado también a la ciudadanía que lleve a cabo acciones como si esa realidad ya hubiera llegado. El diputado separatista lanza tres ideas: poner el CAT en las matrículas, hablar únicamente en catalán y comprar lotería catalana. Para comprobar lo alejado que vive Canadell, y el resto de diputados independentistas de la realidad del resto de la ciudadanía basta comprobar como los catalanes fueron la tercera región española que más gastó en la lotería nacional.
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