En nombre de las víctimas del terrorismo, de sus familias y de todos los ciudadanos que aún recordamos el sufrimiento y el dolor causados por la banda terrorista ETA, expresamos nuestra más profunda indignación y rechazo ante las recientes concesiones de terceros grados penitenciarios a miembros condenados de esta organización criminal.
La sociedad española no puede ni debe olvidar las décadas de terror, violencia y sufrimiento que ETA infligió a cientos de familias y a la población en general. La memoria de las víctimas y el respeto a la justicia son principios fundamentales para la convivencia pacífica y la democracia. La impunidad, o cualquier indicio de ella, constituye una falta de respeto hacia quienes fueron arrebatados de sus seres queridos y hacia quienes lucharon incansablemente por la libertad y la paz en nuestro país.
La dignidad de las víctimas y la integridad del sistema democrático exigen que la ley se aplique con rigor y que no se concedan privilegios inmerecidos a quienes sembraron el terror y el odio. “No podemos permitir que se degrade el valor de la justicia ni que se olvide la memoria de quienes lo dieron todo por la libertad”.
Por tanto, manifestamos nuestra total repulsa a las decisiones de concesión de terceros grados a terroristas de ETA y pedimos que se revoquen estas medidas, manteniendo firme el compromiso con la verdad, la justicia y la reparación hacia las víctimas. ¡Por la memoria, por la justicia y por la dignidad de las víctimas del
terrorismo!
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