El periodista Albert Soler dedicó un artículo en el Diari de Girona al testimonio que el líder de los Mossos per la Independència, Albert Donaire, prestó ante el Tribunal Supremo en el juicio por el proceso secesionista.
Donaire estuvo presumiendo en los días anteriores que iba a adoptar una actitud desafiante ante el Supremo, pero a la hora de la verdad no solo no plantó cara, sino que argumentó mala memoria en algunas de sus respuestas.
Esta actitud de Donaire motivó el artículo de Soler, titulado «Les cançons d’en Donaire al Suprem» [Las canciones de Donaire al Supremo], y que finalizaba con este párrafo:
«Pero, quiso la mala fortuna que un día tuviera que declarar ante un tribunal, y allá quedó claro que Donaire era valiente solo en las redes sociales. Y, claro, uno ve el triste papel que hizo, atenazado por el miedo, y se pregunta en manos de quién está nuestra seguridad. Si Donaire nos ha de defender alguna vez, igual Abascal tendrá razón y más vales que nos armemos hasta los dientes nosotros mismos».
Soler colgó este artículo en su perfil personal de Facebook y Albert Donaire y su madre, Teresa Maria Malagelada, mantuvieron una disputa con el periodista.
La madre de Donaire le dijo a Soler que «si tú estuvieras delante de Marchena te cagarías de miedo. A ver si tienes narices de salir del armario que tu perfil es de amargado rencoroso. No te atreves a decir las verdades de la Arrimades [sic], o de en Rivera, Abascal y Casado. Eres un cagón«.
Soler le replicó que «señora mía, yo fui a un colegio de pago, y allá me enseñaron a asumir mis palabras delante de quien sea. Si digo ‘A’, repetiré ‘A’, delante de Marchena y delante de nuestro señor al juicio final, si es necesario».
Malagelada le tildó de «no tener educación con tus comentarios y viendo las fotos que cuelgas y contra quién vas creo que te lo deberías hacer mirar», a lo que Soler contestó «solo voy contra los gilipollas, lleven la bandera que lleven«.
La madre de Donaire se tomó este último comentario como un ataque personal, o eso parece, dado que replicó que «tu solo vas contra los independentistas. Y aquí el único gilipollas eres tú«. Y a continuación cargó contra su profesionalidad y el medio en el que trabaja: «Si fueras un buen periodista no trabajarías en el Diari de Girona«.
En estas, otro periodista del Diari de Girona, Jesús Badenes, le pide a Malagelada «un poco de respeto, que yo a usted no le he faltado al respeto».
Soler decidió tomarse con humor el comentario de Malagelada, y aseguró que «sepa que rechacé la oferta del New York Times porque perdía mucho tiempo entre ir y volver del trabajo».
A continuación entra en la disputa Albert Donaire, al que tilda de mantener una «actitud prepotente, miserable y chulesca» contra «los independentistas» y dice que «yo no te podría insultar, porque hacerlo sería un insulto para el propio insulto».
Pero Donaire añade que «tal vez necesitas follar más, y si no puedes, diría que en la farmacia te pueden proporcionar alguna cosa. Eso sí, haz un favor al planeta y no te reproduzcas«. Y se pregunta si al New York Times «le hacía falta un bufón en el diario» o «una cara que ejemplificara el odio y la mala educación».
Soler se cansa de los insultos y le recrimina a Donaire que «alguien que no para de insultar a los que piensan diferente o no son bastante catalanes para su gusto» intente dar lecciones. Y le aconseja que «no haga más el ridículo» que «con el numerito que hizo en el Supremo ya hizo reír a todo un país. Debería esconderse, si tuviera un mínimo de dignidad».
Malagelada sale en defensa de su hijo y afirma que «aquí el único que ha comenzado hablando de gilipollas has sido tú. Debe ser que te identificas mucho con este grupo«.
Y Donaire añade que «¿alguien que supura homofobia y xenofobia me da lecciones de insultar? Lo que debería hacer usted si tuviera dignidad es dejar de hacer de periodista. Y no demostrar sus carencias humanas en público». Y añade en otro mensaje que Soler es «un lacayo del fascismo«.
Soler replica, riéndose, a Donaire diciéndole que «está como una regadera, no me extraña que tenga los problemas de autoestima que me han asegurado que tiene. ¿Por decir que usted se ha cagado en la ropa interior después de fanfarronear en las redes sociales soy homófobo? Me tendrá que explicar la relación que ve, o pensaré que su caso es digno de Freud».
Tras otro intercambio de mensajes entre Soler, Donaire y la madre de Donaire (que pueden encontrar en la galería de imágenes adjunta a esta noticia), en la que incluso el líder de Mossos per la Independència cuelga fotos de Soler (fotos paródicas, que el mismo Soler las había puesto en su perfil de facebook), para intentar ridiculizarlo comentando que «veo su foto y pienso que no lo tocaría ni con un palo», Soler decide acabar la discusión asegurando que «es como hablar como con un niño de primaria».
Y le recomienda a Donaire que «venga, niño, vete a merendar y a dormir, que se hace tarde. Los adultos tenemos trabajo, como para perder el tiempo con niñatos. No sé si te lo he dicho, pero por si las moscas: a cascarla, niño. Te dejo que tengo trabajo».
Soler concluye afirmando «que conste que encuentro enternecedor que una madre salga a defender a su hijo. Y más, si como es el caso, salta a la vista que lo necesita. Para esto están las madres. La próxima vez, señora, acompañe a su hijo a declarar, que las togas le dan miedo y se caga en la ropa interior».
(Nota para los que lean los mensajes en la galería de imágenes: ‘Los Sitios’ era el antiguo nombre del ‘Diari de Girona’)
no recibe subvenciones de la Generalitat de Catalunya.
Si quieres leer nuestras noticias necesitamos tu apoyo.